Los propósitos y nuevo salario
Folclor urbano
Por SALVADOR ESTRADA
chavasec@yahoo.com.mx
Ya viene el año nuevo y una vez que empiece 2020 los buenos propósitos que se hacen para “ser mejores” tendrán que cumplirse en el transcurso del año.
Los ciudadanos de la capital de la República “le echarán muchas ganas” para llevar a cabo sus propósitos, porque empezando la fiesta de la candelaria, los atoles y los tamales, los hacen olvidarse de que tienen que bajar de peso y ¡zaz¡ se rompió la dieta.
Muchos se han propuesto “correr por las mañanas” para estar en mejores condiciones y otros dejar de beber o beber con moderación, pero es difícil cumplir y “vuelven a las andadas”.
Para no “fallarse así mismo” no hay que hacer promesas y hacer lo que se pueda, con gusto y sin presión, para sentirse contento y hacer el esfuerzo por salir adelante en los buenos deseos que se tienen en mente.
El año nuevo, es una nueva aventura que todos vamos a vivir, y que desconocemos “a dónde nos lleve el destino”, pero si tenemos fe tendremos buenos resultados en nuestras actividades.
Para empezar el año tendremos una buena noticia ¡aumento en los salarios mínimos. La Comisión Nacional de los Salarios Mínimos decidió que en 2020 el aumento sea de 20 por ciento. Lo cual se debe celebrar porque en las dos pasadas administraciones del gobierno federal el incremento en los mínimos era de 4.2 porciento.
En esta administración, 2019, el salario se había aumentado a 102 pesos con 68 centavos y ahora subió a 123 pesos con 22 centavos y así seguirá hasta llegar a los doscientos pesos diarios.
Pero después de esta buena noticia vienen las malas por la ambición de los comerciantes que con motivo de las fiestas decembrinas suben precios en diversos productos. Y ante ese abuso el mínimo disminuye su capacidad de compra.
En el “súper” un bolillo cuesta un peso con cincuenta y en la panificadora vale dos pesos y lo mismo el precio de la leche, que en la panadería la expenden con dos pesos de aumento en relación al “súper” que cuesta veinte.
El abuso en el aumento en los precios es lo que lleva al incremento en la inflación por lo cual decían los patrones que no daban un aumento mayor al cuatro por ciento porque causaba inflación, lo que ahora se demuestra que el aumento en los mínimos no es causa de inflación, sino del abuso.
Sin embargo, este nuevo salario aún no es satisfactorio para los trabajadores porque no alcanza para darle a sus familias los satisfactores que requieren.
Es necesario que se vuelva a la política de control de precios de la canasta básica y de que el salario mínimo llegue a los doscientos pesos diarios para beneficio de los trabajadores y sus familias