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Un nuevo judas


29 / 10 / 2019

Folclor urbano

Por SALVADOR ESTRADA


chavasec@yahoo.com.mx

Los trabajadores de los hospitales capitalinos se preparan para vivir un nuevo proceso electoral, a fines del próximo mes, y ya están listos para las campañas de proselitismo.


José Carreón, el actual dirigente quiere la reelección para cubrir su mal expediente, según dicen los trabajadores, quienes han puesto su esperanza de mejorar las condiciones generales de trabajo en su compañero Alejandro Mayen.


En la ciudad de México existen 42 hospitales en donde laboran 9 mil 107 empleados entre enfermeras y administrativos, quienes irán a las urnas el próximo 26 de noviembre.


Mayen tiene veinticinco años de laborar en el administrativo y conoce bien el movimiento de los hospitales por lo cual los trabajadores lo lanzaron a la lucha sindical para que los represente y se termine el autoritarismo de Carreón que se ha apoderado del deportivo 18 de marzo para manejar a su antojo las mensualidades que pagan los trabajadores.


El candidato Mayen en su programa de trabajo señala la necesidad de más plazas para las enfermeras, que son extraordinarias en su labor en todos los hospitales, porque va en aumento el número de pacientes y ellas hacen su trabajo con mucha entrega y les dan, como dijo el Papa, cariño terapia.


La capacitación del personal, es otra de las demandas que tiene Mayen que plantear a las autoridades del Distrito Federal para que las enfermeras y los administrativos “sepan más para servir mejor”.


La labor que ha realizado José Carreón, actual dirigente ya fue calificada de corrupta por la base trabajadora que, hartos de su mal proceder, tienen plena confianza en Alejandro Mayen para que ejerza un nuevo liderazgo que beneficie a los trabajadores y no para beneficiarse con ellos como lo ha hecho Carreón por lo cual no quieren que siga manejando la sección por otros cuatro años más porque ya lleva ocho.


Y dan a conocer que Carreón para “asegurar otro periodo de cuatro años más al frente de la sección doce” anda comprando votos porque regala electrodomésticos violando así el proceso electoral.


Para las elecciones del 26 de noviembre se van a registrar, el 16 de ese mes, Carreón, Alejandro Mayen y “para taparle el ojo al macho” -por aquello de la paridad- Marta Malagón, a quien Carreón, dicen los trabajadores, le pagará la campaña para que haga mal obra.


Los trabajadores de la sección doce del Sindicato de Trabajadores del Gobierno de la Ciudad de México acusan a Carreón de “convertirse en cacique” y quiere la segunda reelección porque en esa sección ha encontrado “una mina de oro”.


Explican que ya no es dirigente laboral, sino empresario que con dinero de las cuotas sindicales se hizo dueño de una empresa privada que la impuso a los directivos de los hospitales para que contrataran los servicios de limpieza en los 33 que tiene salubridad, las cinco unidades médicas que existen en los reclusorios, dos hospitales toxicológicos y dos oficinas centrales.


Además, cuentan, molestos, que Carreón traicionó a Juan Ayala, para que dejara la secretaría general del Sindicato de Trabajadores del Gobierno Capitalino, por lo cual lo ven como un Judas, que traicionó al Maestro por treinta monedas.

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